La subida de la factura de la luz aplicada recientemente va a obligar a los usuarios a buscar ideas con las que poder ahorrar de forma diaria. Por esa razón, te damos varios consejos con los que se puede dosificar el consumo eléctrico de cualquier hogar.
Por todos es sabido que el Gobierno de España subió el precio de la luz de forma reciente. Esta subida ha cogido por sorpresa a muchos usuarios que, en este instante, tienen dudas sobre cómo poder sobrellevar este cambio. En ese sentido, el objetivo de cada casa será intentar paliar esta subida con una buena dosis de ahorro que pueda aliviar sus próximas facturas. Por ello, lo más importante para poder ahorrar es conocer los nuevos horarios en los que la luz es más barata y, además, saber de primera mano unos cuantos trucos que nos servirán para solventar esta situación de una forma mucho más cómoda. Es el momento de concienciarse para ahorrar.
Horas valle, el momento clave
En esta nueva subida del precio de la luz se han establecido tres tipos de horarios donde hay tres tarifas diferentes. El primero y más importante es el conocido como Hora Valle. Ese es el momento en el que la luz es más barata durante el día. Este periodo arranca a las 12 de la noche y acaba a las 8 de la mañana entre semana, mientras que los fines de semana y días festivos se mantiene durante las 24 horas del día. Ese es el mejor momento para empezar a ahorrar.
La tarifa media se establece en el periodo que se conoce como Hora Llana. Este periodo es de 8 a 10 de la mañana, de 2 a 6 de la tarde y de 10 a 12 de la noche entre semana. En este momento la luz es un poquito más barata, pero no más que durante las Horas Valle. Son momentos clave para poner lavadoras, el lavavajillas o enchufar algunos aparatos electrónicos.
Por último, la tarifa más cara es la conocida como Hora Punta. Este periodo es de 10 de la mañana a 2 de la tarde y de 6 de la tarde a 10 de la noche. En estos horarios es preferible sólo mantener enchufado lo imprescindible y dejar otro tipo de tareas para otros momentos donde sí que podamos encontrar una tarifa más asequible. Sin embargo, es notorio lo complicado que es llevar a cabo ciertas tareas o trabajos sabiendo que esas horas suelen ser las más concurridas.
Trucos para ahorrar en los electrodomésticos más usados
Según varios estudios, la nevera, la lavadora, la televisión, el horno y los ordenadores son los elementos que más energía consumen en cada hogar. Aquí vamos a dejarte algunos trucos con los que vas a poder ahorrar algo de dinero que repercutirá en la factura de la luz.
La nevera: No dejar la puerta abierta nunca porque se obliga al motor a operar a mucha potencia y no meter alimentos que estén muy calientes, ya que esto último obliga al frigorífico a trabajar con más fuerza. Por otro lado, conviene tener una nevera de categoría energética A +++, pues puede llegar a ahorrarte más de 1000 euros durante la vida útil del propio electrodoméstico.
La lavadora: Hay que utilizar programas cortos y en frío en caso de que sea posible. La mayor parte de la energía se emplea en calentar el agua. También hay que tener en cuenta que, si no se dispone de una lavadora regulable, es preferible llenar al máximo.
La televisión: No dejarla nunca en standby y cerciorarse de que está completamente apagada. Una tele en standby gasta tanta energía como un ordenador a pleno rendimiento. Además, un televisor LED gasta mucha menos luz que los que son de cualquier otro tipo.
El horno: No abrirlo mientras se esté cocinando porque se desperdicia casi un 20% de la energía que emplea. Limpiarlo bien para que sea más eficiente y apagarlo un poco antes de terminar de cocinar para aprovechar el calor que queda dentro hasta que se enfríe.
El ordenador: Bajar la iluminación de la pantalla es clave para gastar menos energía, así como quitar el salvapantallas y apagar el resto de los aparatos periféricos que no se estén usando. Cuando no vaya a usar hay que cerciorarse de que está completamente apagado.